La decisión fue acordada entre Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta. El referente amarillo local confirmó que competirá por la gobernación por fuera de Juntos por el Cambio, en una provincia que gobierna la UCR y en la que existen las PASO.
La interna de Juntos por el Cambio volvió a entrar en ebullición en las últimas horas luego de que Omar De Marchi líder del PRO en Mendoza , confirmara que competirá por la gobernación por fuera de la coalición opositora . Entonces, la conducción nacional del PRO, tras un acuerdo entre Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta, oficializó este miércoles la intervención del partido en la provincia, donde gobierna la UCR y existen las PASO. Pero la conducción local ya advirtió que irá a la Justicia.
Como informó el interventor será Humberto Schiavoni, jefe del bloque amarillo en el Senado y uno de los dirigentes cercanos al expresidente Mauricio Macri. La intervención fue dispuesta por 30 días y la resolución lleva la firma de Patricia Bullrich, como presidenta del PRO nacional, y Eduardo Macchiavelli, Secretario General del partido y uno de los armadores políticos de Rodríguez Larreta en el interior. El objetivo: inscribir al PRO dentro de Cambia Mendoza.
La decisión de intervenir fue votada por el Consejo Nacional del partido y resuelta por 31 votos a favor y 3 en contra. Votaron en contra el propio Omar de Marchi –que formó parte hasta hace poco del armado federal larretista-, el presidente del PRO mendocino Álvaro Martínez, y el riojano Julio Sahad, cercano a los dirigentes de Mendoza.
Poco después, en un comunicado firmado por Martínez, el PRO de Mendoza advirtió que “cualquier intento de intervención del PRO en Mendoza por parte del Consejo Nacional, será respondido con la acción judicial correspondiente”, y anticipó así una impugnación que deberá resolver la Justicia Electoral.
Hay antecedentes recientes de diputadas judiciales: en la pelea interna en Salta la Justicia Electoral le dio la razón al sector del partido que encabeza Patricia Bullrich y el PRO quedó dentro de la versión local de JxC. En cambio, en Tierra del Fuego, la Justicia invalidó una intervención que decidió Bullrich de forma unilateral en contra de un dirigente larretista local, sin pasar por los órganos partidarios correspondientes.
En la conducción nacional interpretan que el planto judicial del PRO mendocino tendría poco efecto, considerando que esta vez hubo acuerdo claro entre el bullrichismo y el larretismo -y el macrismo- para avanzar con la intervención en la provincia. Sin embargo, el acuerdo no hizo desaparecer los tironeos internos
“Es una derrota política para Larreta. Que un armador político se le revele y debilite su relación con el radicalismo. ¿Si no puede conducir a su gente como va a conducir el país?”, interpretó, uno de los principales armadores de Patricia Bullrich. En el entorno del Jefe de Gobierno aseguraron que Larreta mantuvo su palabra y que el PRO jugaría dentro de Cambia Mendoza, más allá de quién fuera el que quisiera romper con la coalición opositora.