A partir de una Resolución del SENASA que se publicará en el Boletín Oficial, se modificará el plan de vacunación contra la fiebre aftosa, que generará un ahorro para la producción ganadera de aproximadamente 25 millones de dólares.
La medida del Gobierno Nacional establece que en la segunda campaña de vacunación del 2026 se dejarán de vacunar vaquillonas, novillos y novillitos, sin comprometer a la sanidad animal, debido a que poseen la inmunidad necesaria. Esta iniciativa implicará un ahorro cercano a 14 millones de dosis y alrededor de 22 millones de dólares.
Además, los establecimientos de engorde a corral quedarán exceptuados de la primera campaña de vacunación. Esta decisión permitirá una disminución de casi dos millones de dosis, con un ahorro estimado de tres millones de dólares para el sector productivo.
En resumen, este conjunto de medidas generará una reducción de 16 millones de dosis de la vacuna antiaftosa sin comprometer el comercio internacional, lo que implica un ahorro estimado total para los productores de 25 millones de dólares.