Los trabajadores nucleados en la AOT piden una actualización salarial acorde al convenio, el cual no se otorga desde abril pasado. El miércoles las partes volverán a conversar. En el país los números de la industria del sector cayó un 21% interanual.
A la salida del turno, los obreros de una de las fábricas más grandes de la provincia compartieron un almuerzo y enarbolan carteles con los pedidos de una recomposición salarial. El arroz con pollo popular es una de las modalidades de reclamo de los trabajadores que están en medio de un pedido por actualización de los salarios que se congelaron desde abril, según informaron. La industria y el sector textil en particular son uno de los más golpeados por los vaivenes de la economía.
En junio de 2024, el índice de producción industrial manufacturero del país registró una caída de 20,1% respecto a igual mes de 2023. El acumulado de enero a junio también presentó una notable disminución de 16,1%, según los datos más recientes publicados por el INDEC. Las textiles fueron uno de los sectores más golpeados por la crisis, con una merma del 21% interanual en agosto, de acuerdo con el organismo nacional.
Abril fue uno de los meses de mayores turbulencias, con anuncios de suspensiones en prácticamente todas las plantas textiles del país y de la provincia, entre ellas, en Bella Vista y Monte Caseros. En Goya, Alal en dicho mes había anticipado estas medidas. Actualmente, mantiene a gran parte del personal que volvió al trabajo. En la fábrica Tipoití, ubicada en la ciudad de Corrientes, despidieron a 76 trabajadores entre marzo y abril, según informaron desde el sindicato. Todos habrían percibido sus respectivas indemnizaciones.
Sin embargo, el conflicto continúa. Ayer, los trabajadores volvieron a dar a conocer su demanda de una recomposición salarial a través de un almuerzo popular. A la salida del turno, los obreros cruzaron la avenida Armenia y, en la vereda del frente, cocinaron un arroz con pollo a modo de visibilizar la situación, con carteles en los cuales se explicitaba el reclamo.
Los trabajadores piden la actualización según convenio nacional de los salarios. Indicaron que estos están congelados desde abril pasado. “Hoy un obrero de Tipoití está cobrando entre $500.000 y $550.000 y deberían estar entre los $800.000 y $850.000”, informó el secretario adjunto de la Asociación Obrera Textil (AOT) Corrientes, Isaac Solís.
Estos ingresos que no se abonaron, representan aproximadamente un 22% del salario, según indicaron desde el gremio. A lo que se suman otros ítems como funciones, categoría y el aguinaldo. En la fábrica hay aproximadamente 550 obreros nucleados en AOT, según informó Solís y otros 150 se nuclean en el Sindicato de Empleados Textiles (SETIA). De allí que se trata de un gran volumen de empleados que dependen de la planta.
Y aunque el conflicto gremial data desde abril con petitorios ante la Secretaría de Trabajo de la Provincia por el pago de días feriados, actualmente se encuentran en una etapa de conciliación obligatoria dictada por la Secretaría de Trabajo de la Nación, luego de que la AOT inscribiese medidas de fuerza. Este jueves se autorizó una prórroga de la misma, la cual culmina este miércoles, cuando las partes volverán a sentarse para negociar.
ATE denuncia persecución
La Asociación Trabajadores del Estado (ATE) Corrientes expresó su profunda preocupación ante los procesos en contra de los delegados de Vialidad Provincial quienes fueron sumariados por denunciar irregularidades y el robo de carteles del sindicato. La asociación exige “el urgente cese de las hostilidades y represalias a quienes ejercen su derecho constitucional de representar los intereses de los trabajadores del sector, según la Ley de Asociaciones sindicales Nº23.551”. Desde febrero pasado la Dirección Provincial de Vialidad está a cargo del ingeniero Luis Pablo Cardozo, quien sucedió a Justo Espíndola que renunció en medio de denuncias del gremio en su contra.
Repudian atentado contra un gremio
En la madrugada del 5 de septiembre la Agremiación de Docentes Universitarios de Mar del Plata (ADUM) recibió un disparo en la ventana de la oficina ubicada dentro del Complejo Universitario Manuel Belgrano. El Frente de Asociaciones de Base (FAB) expresó su repudio al atentado y su solidaridad con los afiliados.
En ese sentido, también adhirieron al repudio los sindicatos docentes de base de la Universidad Nacional del Nordeste (UNNE), como CODIUNNE y ADIUNNE, desde donde se expresó preocupación por el hecho. “Este ataque se da en un contexto en el que nuestros derechos como trabajadores están siendo vulnerados” y de ataque contra la educación pública, indicaron.