El ataque ocurrió horas antes del partido entre el Canalla y Racing por la Liga Profesional en el estadio Gigante de Arroyito.
Horas antes del partido entre Rosario Central y Racing en el Gigante de Arroyito, balearon la casa de Leopoldo Martín Martínez, alias “Pititto”, el barrabrava del Canalla, que señalan como heredero del asesinado líder de la barra brava del conjunto rosarino, Andrés “Pillín” Bracamonte.
Fuentes policiales indicaron que el ataque ocurrió en la tarde del sábado en Villa Manuelita del bajo Ayolas, en la zona sur de Rosario. Una mujer escuchó detonaciones de arma de fuego y al salir de la casa, comprobó que las balas habían impactado contra el frente.
Cómo fue la balacera de la casa de “Pitito” Martínez: cinco disparos y una investigación en curso
La policía encontró cinco vainas servidas, informó Rosario 3. Tres impactaron contra la puerta de la casa, uno fue encontrado en la vereda y el restante en el interior de la casa de “Pitito”. La mujer, que es la única víctima del ataque, declaró que desconocía el origen de la balacera y también a los posibles autores.
Además, se pudo constatar que el domicilio atacado es el mismo en el que “Pitito” Martínez fue detenido el 2 de julio de 2020. Había sido arrestado por el hallazgo de un arma calibre 380 con numeración limada en su casa, que fue allanada por la causa de lavado por la que cayó el “Pillín”.
Quién es “Pitito”, el barra de Central, que todos señalan como el heredero de “Pillín” Bracamonte.
El 25 de febrero último, “Pitito” tomaba mates con su familia en su casa y con la puerta entreabierta, cuando un hombre armado saltó desde una moto y entró a la casa. El agresor apuntó contra Martínez y gatilló un par de veces, pero el barrabrava se tiró detrás de una mesa.
“Los tiros lo alcanzaron en la zona lumbar y terminó en el Hospital de Emergencias Álvarez de Rosario”, había contado la madre de Martínez en diálogo con La Capital.
“Mi hijo no tiene nada que ver con la barra de Central. Trabaja en la UOCRA de San Lorenzo, en la construcción. Se levanta a las 6 de la mañana y no vuelve hasta las 18. Está todo el día trabajando y cuando estaba descansando va y le pasa esto. Gracias a Dios, está bien. Esto fue una tentativa de robo”, explicó.