Le pidió perdón a Dios y aseguró que sufría acoso. “Las cosas simplemente cayeron en su lugar como si Satanás me dirigiera”, señaló en su último mensaje.
“Lo siento, Dios, te he fallado, esto no fue culpa tuya, sino mía”, confesó en su “nota de muerte” Andre Bing, el gerente de 31 años de Walmart que abrió fuego dentro de la tienda donde trabajaba, mató a seis personas e hirió a otras cuatro. Aseguró que sufría acoso.
Las autoridades de Chesapeake, Virginia, difundieron el texto que Bing escribió en su teléfono el viernes. “Fui acosado por idiotas con poca inteligencia y falta de sabiduría. Fui igual de culpable y le fallé a mi equipo de gestión y a todos los que alguna vez me amaron al convencerlos de que yo era normal”, lamentó.
Bing pedía perdón a Dios y también a quienes se convertirían en sus víctimas: “Lo siento por todos, pero no planeé esto. Prometo que las cosas simplemente cayeron en su lugar como si Satanás me dirigiera. Desearía haber podido salvar a todos de mí mismo. Que Dios me perdone por lo que voy a hacer”.
El martes, la tienda de Walmart estaba llena de clientes que se preparaban para el Día de Acción de Gracias cuando Andre Bing, a las 22 h (hora local), entró a la sala de descanso del personal y comenzó a disparar. Después de esto, se suicidó.
Altos funcionarios del municipio de Chesapeake afirmaron el viernes que Bing había comprado legalmente la pistola de 9 mm utilizada en el tiroteo el mismo día del ataque.
Este es el segundo tiroteo en Virginia de este mes. El 13 de noviembre, un alumno de la Universidad de Virginia mató a tres jugadores de fútbol e hirió a dos estudiantes más después de una excursión escolar. De acuerdo con el registro de la web Gun Violence Archive, estos dos elevan a 600 la cifra de tiroteos masivos durante 2022.