El atacante no sólo tenía antecedentes de violento, sino que además cargaba con varias denuncias en su contra y medidas de restricción de acercamiento. No hizo caso a ninguna y a pesar de ello continuaba en libertad, acechando a sus víctimas.
A cinco días del brutal intento de femicidio contra María de los Milagros, a manos de su expareja Kevin Zamudio, las consecuencias tanto físicas como emocionales siguen acosando a la víctima y a su familia. Y es que desde hacía mucho tiempo, la joven mamá venía advirtiendo su temor a un posible ataque de parte de su expareja. La Justicia le había interpuesto una medida restrictiva de acercamiento, pero el acusado ya tenía antecedentes de incumplimientos y amenazas reiteradas. “Mili está aterrada de que el tipo salga libre y vuelva para lastimarla, no quiere asomarse ni a la ventana, las heridas que dejó el ataque no sólo son físicas, sino también emocionales y son gravísimas”, relató Claudia, su madre.
“Por las noches se despierta llorando, llama a los gritos a su padre por miedo y él termina durmiendo a su lado para darle un poco de tranquilidad y seguridad para que descanse. Ella se está recuperando, no quedó bien de la garganta, pero le están haciendo las curaciones correspondientes. El cuchillazo tocó las cuerdas vocales y le cambió la voz. Los médicos están viendo qué tratamiento se le puede hacer para mejorar”, contó en diálogo con diario época Claudia, madre de María de los Milagros Barrios, la joven de 26 años atacada a cuchillazos el miércoles 16, alrededor de las 8:50, en la zona de monoblock del complejo Mil Viviendas.
Milagros ya se reunión con el fiscal del caso, a quien le pudo contar lo sucedido aquella mañana, cuando volvía a la casa de sus padres en la que vive, luego de dejar a su beba en el jardín maternal para poder ir luego a trabajar. Kevin la estaba esperando, discutieron y cuando ella se disponía a subir al departamento, su expareja la atacó por la espalda con un cuchillo que terminó clavándole en la garganta, para luego darse a la fuga.
“Vivimos momentos de angustia ese día. Nosotros presenciamos todo el ataque, ya que vimos cuando llegó y cuando discutieron. Su papá y yo estábamos de licencia laboral en casa y cuando la atacó, bajamos corriendo a socorrerla. Ella pedía auxilio a gritos y estaba toda ensangrentada. Nos agarró mucha desesperación y comenzamos a pedir ayuda. Un señor que pasaba en un auto paró y nos ayudó a trasladarla hasta el Hospital Escuela”, agregó la mamá de la joven atacada.
“Si bien estamos preocupados por el daño físico que le produjo el ataque en su cuello, estamos también muy preocupados por su salud emocional. Ella sufre ataques de pánico. Por las noches no quiere prender el ventilador, ni el aire acondicionado para que no hagan ruido, porque cree que Kevin va a volver a atacarla y también nos puede lastimar. En la semana comenzaremos con ayuda psicológica para que ella pueda ir mejorando ese cuadro que la tiene muy angustiada”, concluyó Claudia.
Antecedente
En los últimos días trascendió que Zamudio, no sólo había sido denunciado por violencia de género, amenazas y hostigamiento por parte de María de los Milagros y su madre, sino que además una expareja del sujeto ya lo había denunciado el año pasado por haberla atacado a piñas, provocándole heridas en su rostro y su cuerpo.
La Justicia, al igual que en el caso de Milagros, les otorgó una medida restrictiva para que el agresor no se les acerque, pero el violento desobedeció permanentemente la misma y atacó una y otra vez a sus víctimas.
Ana Laura, una expareja de Zamudio, al enterarse de lo sucedido con Milagros escribió en su red social de Facebook: “Esta es la persona que casi me mata a piñas el año pasado. Lo denuncié y hasta una causa se le hizo por violencia de género agravada por el vínculo. ¡Y nada!. A mí me dieron un papel (La perimetral) y a él, lo dejaron que se vaya a su casa. Y ahí está, lo volvió hacer, y con ella (por Milagros) no fue la primera vez. ¡Estamos muy solas y la Justicia no nos ayuda, entonces ayudémosnos entre nosotras! Ahora ya todas conocen su cara y lo que hace. Cuidémonos entre nosotras”, destaca otra de las víctimas de Zamudio.
FUENTE: Diario Época.