El acusado, un hombre de 46 años, fue beneficiado con prisión domiciliaria porque los cupos en los lugares de detención están llenos y por su enfermedad.
En la noche del martes detuvieron a un hombre de 46 años acusado de abusar de una menor. El sujeto la contactó por una aplicación de citas y cuando se encontraron la atacó. Fue detenido, pero a las horas le dieron prisión domiciliaria por falta de lugar en las cárceles.
Todo ocurrió en la ciudad de Puerto Madryn, Chubut. El denunciado contactó a la víctima a través de una app de citas, mantuvo un encuentro con ella pero todo se volvió un infierno.
Por la agresión, la habría contagiado de una enfermedad por lo que fue imputado por “abuso sexual con acceso carnal agravado el contagio de enfermedad de transmisión sexual”.
Tras la denuncia, la detención se produjo la noche del martes luego del pedido de la fiscal María Angélica Carcano. La Policía de Chubut allanó su domicilio y secuestró varios elementos electrónicos para ser peritados.
Sin embargo, pese a la grave denuncia y el agravante, el sujeto no está preso, sino que fue beneficiado con prisión domiciliaria ya que los lugares de detención disponibles tienen los cupos completos para los detenidos y también, informaron los investigadores, por la enfermedad que posee, la cual generaría riesgos en una situación de encierro.
El Código Penal argentino impone por estos delitos una pena de ocho a veinte años de prisión a quien cometa abuso sexual con acceso carnal y tenga conocimiento de ser portador de una enfermedad de transmisión sexual.