(Corresponsalía Buenos Aires)El logro de sus talentos deportivos -¿O la suerte?- le fue esquivo a Deportivo Riestra a lo largo de sus más de 90 años de historia. Nacido en 1931, En 1990 quedaba desafiliado tras ser el peor equipo de la D, con la resiliencia propia de equipo chico y sufrido se rearmó hasta lograr el hito, en la Copa Argentina 2011/12, cuando llegó a la fase final del torneo. Pero su mayor momento de gloria lo alcanzaría esta semana cuando logró ascender a Primera A y más allá de por méritos estrictamente deportivos, todos le atribuyen el logro a… Víctor Stinfale.
Stinfale es un abogado mediático conocido por haber participado en resonantes causas. Entre sus clientes tuvo a Diego Maradona (el 10 llegó a usar la camiseta de Riestra a instancias de su letrado); a José Barrita (exlíder de la 12) y Carlos Telledín, histórico acusado por el caso AMIA. Alguna vez llegó a afirmar: “Si me da un millón de dólares, defiendo a Hitler”.
Pero también tuvo sus problemas con la ley y él mismo debió requerir defensa legal. Es que Stinfale ha estado involucrado en varias controversias legales, incluida la acusación de ser uno de los organizadores del festival de música electrónica Time Warp, realizada en el predio Costa Salguero, en la Ciudad de Buenos Aires, en el que en 2016 murieron cinco personas por la ingesta de drogas de diseño mortales. Entonces había sido acusado de “facilitación de un lugar para la comercialización de estupefacientes, homicidio culposo y lesiones graves culposas”.
Por aquél caso estuvo 70 días preso pero finalmente resultó absuelto en 2020.
Pero más allá de sus ires y venires con su ámbito natural -el judicial-, Stinfale es un futbolista frustrado. Jugó en las divisiones inferiores. Atajó para Nueva Chicago. Ocupó el banco de suplentes en un partido de primera, pero no llegó a debutar. Luego paso por Platense, antes de dejar el fútbol.
Eso explica su retorno al deporte balón en… Deportivo Riestra. Voceros del flamante club de primera dicen que Stinfale es un mero “colaborador” de la institución que tiene su sede de el barrio porteño de Nueva Pompeya y su modesto estadio (3000 localidades) en Villa Soldati. Pero extraoficialmente se dice más: él fue el verdadero factótum de la transformación gerencial de Riestra.
Se encargó de ordenar al club como si fuera de primera división ni bien se involucró, una década atrás. Comenzó a vestirlo con indumentaria de afamadas marcas (la alemana de las tiras, por ejemplo) , le puso de sponsor a la bebida energética internacional que él representa en Argentina y logró que el modesto equipo blanquinegro entrenara en el predio de La Candela, ubicado en el partido bonaerense de San Justo, en el que en el pasado entrenaba Boca Juniors. Riestra compró el predio por una suma que asciende a las ocho cifras en dólares.
Mientras, empezaban a sucederse los logros deportivos en Riestra. Stinfale logró dos ascensos consecutivos: a la Primera C en 2014 y a la Primera B en 2015.
Pero es en esta última categoría donde el abogado comenzaría a ganarse una muy mala reputación entre el resto de los dirigentes de clubes de la Primera B. Una serie de escandalosos fallos arbitrales a favor del club de Pompeya provocaron malestar pero también la certeza de que detrás de ellos estaba la ágil mano de Stinfale, entrenada en los depósitos de expedientes de muchos juzgados.
En la temporada 2016/2017 jugó la definición con Comunicaciones para ascender a la B Nacional y hubo polémica.
Cuando faltaban cinco minutos para finalizar el partido, hinchas, allegados e incluso jugadores que no estaban convocados invadieron el campo de juego. El reglamento indicaba que debían quitarle los puntos, pero el partido se reanudó a los días en cancha neutral, sin público, y Riestra finalmente ascendió.
Volvería a descender pero en 2017 pero recuperó esa categoría en 2018. Ahora, Stinfale y Riestra están en Primera A y es la hora de la verdad. El fútbol ¿tiene la palabra?
¿Quién es Stinfale, el supuesto artífice del ascenso de Riestra a Primera?
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