El tercer mes del año cerró con un fuerte impacto en los bolsillos de los argentinos.
Como ocurre todos los años, marzo es uno de los meses de mayor demanda en cada familia. Las compras para el regreso a las clases generan gastos extraordinarios; pero además el precio de los alimentos tuvo también impacto. Abril inició con aumento de combustibles y de productos frutihortícolas.
El impacto de las subas es cada vez más preocupante para los asalariados y los cuentapropistas. En Corrientes, como en las provincias del Nordeste Argentino (NEA), se siente aún más ya que los sueldos, de acuerdo a los índices analizados en las últimas semanas, marcan que es la región más pobre del país.
En el primer día de abril se registraron aumentos en distintos productos alimenticios. En el caso de las verduras y frutas, hay productos que no llegan a los comercios de barrios por el incremento que tuvo.
En la mañana de ayer, por ejemplo, en algunos kioscos de la periferia de Capital se pudo constatar el incremento del huevo. Por unidad algunos comercializan a 200 pesos.
En otros productos, los comerciantes anticipan que por el cambio de temporada, se espera que algunos valores bajen, pero por el momento el kilogramo de tomates está alrededor de 2.500 pesos y una docena de mandarinas, por ejemplo, se consigue a alrededor de 2.000 pesos.
En una verdulería en la que consultó este medio, el precio de la lechuga sigue elevado y las variedades repollada y lisa siguen a $4.000; mientras que la mantecosa vale entre $5.000 y $6.000.