En un importante hito para la industria energética argentina, se dio inicio al proceso de llenado del Gasoducto Presidente Néstor Kirchner (GPNK). El evento tuvo lugar en el kilómetro cero del gasoducto, con la puesta en funcionamiento de la estación de Medición Tratayén, ubicada en la provincia de Neuquén, y la activación de los primeros 29 kilómetros de la infraestructura.
El GPNK, cuya habilitación y llenado se realizará por etapas, tiene prevista su inauguración oficial para el próximo 9 de julio. Para llevar a cabo esta imponente obra, se utilizaron más de 47.700 caños de acero, cada uno con una longitud de 12 metros.
Un aspecto destacado de este proyecto es la implementación por primera vez en nuestro país de soldadoras automáticas, una tecnología de vanguardia a nivel mundial que ha permitido reducir considerablemente los tiempos de construcción. Como resultado de esta eficiencia, se ha logrado un tiempo récord para la finalización de la obra, con tan solo 178 días transcurridos desde la primera soldadura realizada el 16 de noviembre de 2022 en Salliqueló, Buenos Aires, hasta la última efectuada el 12 de mayo de este año. Durante este período, se soldaron en promedio 5 kilómetros de caños por día en los tres frentes de trabajo.
El peso total de todos los caños utilizados en el gasoducto asciende a aproximadamente 300.000 toneladas, equivalente a la magnitud de 4.285 Obeliscos porteños. Estos impresionantes números demuestran la envergadura de la obra y el esfuerzo realizado para su materialización.
Principales características del Gasoducto Presidente Néstor Kirchner
El Gasoducto Presidente Néstor Kirchner es una obra de trascendental importancia, planificada y ejecutada por Energía Argentina, con el objetivo de ampliar la capacidad de transporte de gas en nuestro país. Su traza troncal abarca una extensión de 573 kilómetros, desde Tratayén en Neuquén hasta Salliqueló en Buenos Aires, atravesando las provincias de Río Negro y La Pampa. El gasoducto cuenta con un caño de 36 pulgadas de diámetro.
Beneficios de la obra
La puesta en funcionamiento del Gasoducto Presidente Néstor Kirchner conlleva una serie de beneficios significativos para el desarrollo económico y energético de Argentina. Entre ellos, se destaca el incremento en la producción de Vaca Muerta, la segunda reserva de gas no convencional más grande del mundo, y su posterior transporte hacia los centros de consumo.
Asimismo, se estima que esta infraestructura permitirá ahorrar más de 4.200 millones de dólares anuales mediante la sustitución de importaciones de combustibles. Además, se logrará aumentar la disponibilidad de gas a precios competitivos tanto para la industria como para el comercio y los hogares.