El ministro de Economía llegó este mediodía a Washington para participar de las Reuniones Anuales del FMI y el Banco Central. Ya sostuvo encuentros en el organismo y en el BID.
Desde Washington DC, EEUU – El ministro de Economía, Sergio Massa, se reunió este miércoles por la tarde con funcionarios del Fondo Monetario Internacional (FMI) para analizar la marcha del programa acordado con el organismo, que recientemente aprobó las metas para el tercer trimestre. En la reunión, celebrada en Washington donde en estos días el organismo y el Banco Mundial llevan adelante sus reuniones anuales, los representantes del Fondo consultaron en particular por la marcha de la inflación. En ese sentido, le aseguró que el dato de septiembre estará debajo del 7% aunque los números para los meses siguientes todavía se espera que sean altos.
Massa llegó este miércoles a las 12 del mediodía a la capital de los Estados Unidos. Su primera actividad fue una visita a la sede del Fondo donde se celebró la reunión. Lo esperaban Ilan Goldfajn, director del Departamento para el Hemisferio Occidental del FMI, y con Luis Cubeddu, jefe de la misión del organismo en la Argentina.
Según fuentes oficiales, el encuentro giró alrededor de la marcha de las metas que acordó la Argentina como parte del Programa de Facilidades Extendidas que mantiene con el organismo. La reciente aprobación de las metas del segundo trimestre del año, la forma en que el Directorio del FMI votó por dar el visto bueno que habilitó un desembolso por USD 3.800 millones y el camino hacia la próxima revisión fueron parte de la conversación.
En ese punto, los colaboradores de Massa son optimistas. La nueva revisión, que empieza en noviembre, está avanzada: aseguran que la meta de reservas ya se cumplió gracias al aporte de divisas que generó el esquema de “dólar soja”, que la meta de emisión monetaria también está completa y que sólo falta revisar la de déficit. Aún en ese sentido, en el Gobierno se muestran confiados en que ese tercer visto bueno se va a conseguir sin mayores problemas.
En cuanto a la marcha del programa hacia adelante, los funcionarios del FMI se mostraron interesados por las expectativas de inflación para el futuro inmediato. En ese punto, no tiene muchas buenas noticias que dar luego del 7,4% que marcó el IPC del INDEC en junio y el 7% de agosto. Apenas pudo garantizarles que el dato de septiembre que se publica este viernes va a estar por debajo del mes pasado, debajo del 7 por ciento.
Encuentro con ministros
Apenas pisó Washington, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) ya le tenía preparado un anuncio al ministro argentino. El organismo aprobó un crédito por USD 700 millones para la Argentina que ingresarán a reservas en las próximas 48 horas, según precisó el propio Massa en su cuenta de Twitter.
Con ese visto bueno del BID bajo el brazo, Massa participó por la tarde un conversatorio de Ministros de Finanzas organizado por el BID en su sede de Washington. Allí, los ministros de Hacienda de Uruguay, México, Jamaica y Colombia expusieron la respuesta de sus Gobiernos ante el shock que significaron la pandemia de covid-19, la guerra en Ucrania y el fogonazo inflacionario que se vivió en todo el mundo.
“Quiero agradecer el directorio del banco que aprobó el crédito para la Argentina, que es importante en estas horas en las que uno de los desafíos principales es fortalecer las reservas”, dijo Massa en la sede del BID.
Luego, como sus pares de la región, relató la respuesta argentina a los shocks que supusieron la pandemia y a la guerra en Ucrania. Y se permitió una crítica a su antecesor, el ex ministro de Economía Martín Guzmán.
“Veníamos de un proceso que nos llevó a un desborde del 12,4% al mes de junio en términos del déficit”, se quejó Massa en referencia a la herencia de Guzmán, que renunció en julio pasado. Y reforzó además respecto al desorden en materia monetaria, también heredado.
Con la aprobación de los objetivos del FMI cada tres meses en mente, en el Gobierno se muestran confiados respecto a alcanzar el 2,5% de déficit primario acordado para este año, Massa además se hizo tiempo para un reclamo en la sede del BID.
“Es absurdo que cuando el BID como institución para el desarrollo plantea que tengamos la posibilidad de acceder a inversiones de infraestructura y nuestros países inviertan recursos de sus tesoros, en otros multilateras se compute esa inversión en las metas de déficit. Porque eso condena a nuestros países a ser pobres. Es clave que lo que invertimos en desarrollo sea computado como inversión y no simplemente para el cumplimiento de nuestras metas”, dijo Massa.
Massa se refirió al desafío que representa la guerra en Ucrania para la Argentina al sostener que implicó “tener que duplicar esfuerzos para cumplir los objetivos del programa de acumulación de reservas y de metas fiscales del 2,5% para este año, básicamente por el impacto que representa la suba de energía”. En este sentido, Massa aseguró que “la guerra plantea un desafío para nuestra región, pero también una oportunidad”, debido a que el continente es productor de 80% de las proteínas que consume el mundo y posee vastos recursos energéticos. “Hay un desafío del BID y de los multilaterales para mirar las infraestructuras regionales a los efectos de que los recursos que tenemos se transformen en riqueza de nuestra región”, agregó.