El abogado más mediático habló de todo con Teleshow mientras se prepara para un año intenso de mucho trabajo, exposición y define su rumbo político
Su día parece tener más de 24 horas. Su energía es arrolladora. A sus 58 años y en una misma jornada, Fernando Burlando puede desdoblarse en infinitas y diversas actividades con la misma pasión: desde arrancar muy temprano peleando un caso resonante en Tribunales, almorzar luego con su equipo con el que piensa lanzarse a la política, sacarse fotos para participar de un reality show, jugar un partido de fútbol, cambiar pañales de su beba Sarah o simplemente, tomarse un avión privado y viajar con su pareja, la conductora Barby Franco.
“No te asombres, en mi casa hago muchas cosas también”, avisa en una extensa charla con Teleshow. “Contale que cambiás pañales, que la bañás y la hacés dormir a Sarah”, acota Barby de fondo. Burlando asiente y aconseja: “Fue hermoso volver a ser padre a esta edad, lo recomiendo, háganlo en sus casas”. ¿El secreto para hacer más actividades que un humano promedio sin dormirse en el intento? “Cuando hacés lo que querés, tenés lo que querés, ¿qué más podés pedir? Después se va dando todo solo en la vida, hay que estudiar, hacer las cosas bien, ser buena persona. Es la clave de la felicidad, no hay otra”, argumenta. Con ese mismo arrojo dijo que sí cuando le llegó el llamado para formar parte de The Challenge Argentina, El Desafío, el reality que acaba de estrenar Telefe en el que 18 participantes compiten por agua, tierra y aire. Un formato mundial en el que se combinan habilidades físicas, mentales y sociales. Pero su paso fue breve, porque junto a la boxeadora Carolina Duer quedó eliminado en la primera ronda