Son jóvenes con prontuario delictivo desde hace años. Ahora están acusados de robar en la casa de una familia. La Policía los detuvo y recuperó parte de los objetos sustraídos. En el barrio Parque Ingeniero Serantes, los buenos vecinos están hartos de sus fechorías.
Dos jóvenes hermanos de amplio prontuario delictivo resultaron detenidos ayer bajo acusación de un robo cometido en el barrio Parque Ingeniero Serantes de la capital provincial.
El ilícito damnificó a una familia vecina y otra vez los maleantes quedaron en el tapete por reincidir en este tipo de actos a escasas cuadras de su domicilio.
Vecinos de la populosa barriada, conocida también como “La Olla”, habían denunciado en muchas ocasiones a ambos sujetos por carecer de “códigos” y hacer “desastre” en el barrio donde viven.
Como consecuencia de una denuncia penal, efectivos de la comisaría seccional Vigesimoprimera apresaron a Ariel Alexis V. y Lautaro Andrés V., de 19 y 20 años, respectivamente, reconocidos como responsables de la sustracción de diversos objetos.
El miércoles a la madrugada, según precisiones de los damnificados, ladrones accedieron a su vivienda, revisaron distintas dependencias y escaparon con sillas plásticas, una mesada y un ropero de cinco puertas.
Ayer, policías de la Vigesimoprimera, con la colaboración del Grupo de Respuesta Inmediata Motorizada 2, allanaron el domicilio de los hermanos en pasaje Ñangapirí, entre Valdepeñas y avenida Arturo Frondizi.
En base a distintos informes, desprendidos de la investigación policial, el Juzgado de Garantías a cargo de María Zair Nicolás autorizó a concretar la captura de los hermanos y registrar su casa a la búsqueda de los elementos robados.
Poco después de las 8:30 las autoridades llegaron a la dirección mencionada y sorprendieron durmiendo a las personas que finalizaron detenidas sin ofrecer resistencia.
Según las fuentes, el resultado del procedimiento “fue positivo”, no solo por las detenciones sino porque hallaron parte de los objetos descritos en la denuncia formal.
Ambos hermanos figuraron en noticia policial vinculados a diversos delitos, principalmente de robos.
La particularidad sobre los hechos radica en que la mayoría sucedieron en la propia barriada y tuvieron como víctimas “a sus vecinos”.
Los dos jóvenes son parte de una familia numerosa conocida en la zona como “los carreros de la cortada” y han sembrado miedo por su forma de manejarse, siempre de modo violento.
Frente al temor de sufrir represalias, las personas que padecieron delitos eligieron no radicar denuncias.