Desde la Comuna resaltaron que tienen preparados dos centros de evacuación de ser necesarios. En un trabajo en conjunto con varias áreas, allí les brindarán a los vecinos la posibilidad de estar en un lugar seco y recibir las cuatro comidas diarias.
Debido a la importante creciente evidenciado por el Paraná en las últimas jornadas que podría afectar a los barrios ribereños de nuestra capital, la Municipalidad de la Ciudad de Corrientes se prepara con un operativo en conjunto para evitar que los daños sean lo menos posibles y, si hubiera la necesidad de evacuar, poder ubicar a los afectados en complejos para que tengan una adecuada atención hasta que las aguas vuelvan a su normalidad.
Por tal motivo, época dialogó con el subsecretario de Gestión Integral de Riesgos y Catástrofes, José Pedro Ruiz, cuya área del Municipio se encuentra a cargo del protocolo por la crecida de río. “Estamos trabajando y preparamos dos centros de evacuación, uno en la zona Norte que es el Complejo de Alto Rendimiento y otro en la Sur con el Centro Integrador Comunitario (CIC), de Paysandú y Altagracia”, resaltó.
El funcionario municipal destacó las diferentes áreas que están involucradas entre las que se encuentran “personal de Desarrollo Humano, Salud, Coordinación del Gobierno y la Subsecretaría, que comanda el Centro de Operaciones que está a mi cargo y todos bajo las órdenes directas del intendente, Eduardo Tassano”.
Todo está listo para evitar cualquier sobresalto con la creciente que se vaticina para las costas capitalinas.
Al comentar el trabajo que vienen desarrollando con los centros que contendrán a los posibles evacuados, Ruiz remarcó que lo hacen “con un protocolo de emergencia, en esta situación por inundación por ríos, ya que el Paraná bordea toda la ciudad capital”.
El funcionario comentó a época que el protocolo involucra a las diferentes secretarías del Municipio que integran el Centro de Operaciones de Emergencia, la cual “ya hizo las evaluaciones de la creciente que se espera del río”.
A pesar de tener todo listo para una posible evacuación de las personas que viven muy cerca de las costas, el Subsecretario de Gestión Integral de Riesgos y Catástrofes resaltó que “no tenemos evacuados, trabajamos en base a las tareas que van a desarrollar las actividades dentro de esos centros. Ojalá no haya evacuados, pero en caso de tenerlos estamos trabajando en el cronograma que se llevará a cabo”.
Con la creciente en las puertas de algunos vecinos ribereños, Ruiz remarcó la importancia de que las personas abandonen sus hogares, pero resaltó que algunos de ellas “no quieren ser evacuadas y otras tienen la asistencia de sus familiares que viven más arriba”.
Al respecto de los vecinos que no quieren ser evacuados, dijo que “ese es un problema, y el otro es que no quieren dejar sola su vivienda, siempre dejan a alguien para evitar el robo, eso también es el inconveniente que atraviesa la gente que deja su hogar”.
Para la posible evacuación, el funcionario resaltó la preparación que van a realizar en los centros de evacuados de ser necesaria la asistencia. “Si tenemos personas evacuadas les vamos a dar alojamiento y las cuatro comidas, asistencia de salud”, pero a la vez resaltó que “el hecho que estén evacuadas no quiere decir que no salgan a cumplir su trabajo, ya que se les da la posibilidad de estar en un espacio seco y continuar con sus tareas, con su vida normal, dentro de lo posible”.
“Tenemos estipulado la cantidad de familias, no quiero arriesgar el número, pero estamos preparados para lo que venga”, ya que según Ruiz en el Centro de Alto Rendimiento entran más o menos 80 personas y el de la zona sur también tiene la misma capacidad.
Por último, remarcó que los barrios de la zona norte que se verían afectados son “Galván, Santa Marta, Quilmes, Virgen de los Dolores, Caridi, y en la zona Norte el Cichero, Bañado Norte, Itatí, Quinta Ferré, Anahí, Lomas del Mirador, Molina Punta y Punta Taitalo”.
“El Estado Amarillo se da en los 6,50 metros”
Por la creciente del Paraná, las compuertas de la represa Yacyretá se abrieron, lo que afectó a varias localidades aguas abajo. Capital no escapará a dicha situación, al respecto Ruiz destacó que “para el Instituto Geográfico Militar la cota de inundación de la ciudad de Corrientes es de siete metros. Por debajo de siete metros no debería haber nadie”, en lo que se refiere a vivir cerca del río Paraná con la posibilidad de sufrir una inundación.
Remarcó que actualmente “estamos con una altura de 5,06 metros, estimamos que va a subir 1,40 o 1,50 metro, o sea que vamos a estar cerca de la altura de la cota del estado Amarillo, de los 6,50 metros”.
El Subsecretario municipal dejó en claro que la creciente, tarde o temprano, va a llegar a las costas capitalinas, ya que “las compuertas de Yacyretá están largando 33.600 m3/seg., lo que tenemos que ver es el seguimiento de cuántos días van a erogar esa cantidad de agua, lo que nos dará la pauta de la prolongación de la creciente”, detalló y aseveró que “cuando deje de erogar Yacyretá por debajo de los 33.600 m3/seg. va a comenzar la bajante”.
Ruiz aseveró que en Capital trabajan “con una cota de 6,50 metros que es alerta Amarilla. Teóricamente, por debajo de siete metros que es el nivel de inundación de la ciudad, no tiene que haber nadie. Lo que pasa es que la gente ve, después de tanta seca, que el río se retiró, que hay mucha playa y lugares para habitar”; por tal motivo “la gente baja, pero sabe que se va a inundar en algún momento” debido a que se expone a una creciente como la que estamos atravesando.