Se lanzó el 17 de noviembre, también resguarda a los hombres de cáncer anorrectal y se aplica una sola vez en la vida.
El Virus del Papiloma Humano (HPV, por sus siglas en inglés) es un grupo de más de 200 virus relacionados, de los cuales más de 40 se propagan a través del contacto sexual estrecho. Entre estos, varios serotipos pueden causar verrugas genitales y alrededor de una docena también pueden ocasionar ciertos tipos de cáncer, como por ejemplo cervical, anal, orofaríngeo, pene, vulvar y vaginal.
El 17 de noviembre se lanzó en Argentina la vacuna nonavalente para HPV y el doctor Silvio Tatti (M.N. 54.387) , jefe de Ginecología del Hospital de Clínicas, explicó: “Incluye 9 tipos diferentes de HPV y protege para el 90 % de verrugas genitales y el 90% de las causas de cáncer de cuello de útero en mujeres”.
“También protege a hombres de verrugas genitales y cáncer anorrectal y, eventualmente, algunos cánceres de pene”, añadió el especialista. Además, indicó: “La nonavalente se aplica en Argentina, tiene el beneficio de cubrir 5 genotipos más y se puede aplicar sin límite de edad comenzado a partir de los 9 años”.
¿Cómo se aplica la vacuna nonavalente para HPV?
El Dr. Tatti señaló: “Esta vacuna, por el momento, se aplica una sola vez en la vida. A los niños y niñas menores de 14 años se les aplica 2 dosis y a los mayores 3 dosis. La primera dosis, una a los 60 días y la última a los 180 días”.
“La vacuna está aprobada en Estados Unidos, desde diciembre de 2014, y hay un proceso de acreditación en cada país. La vacuna para HPV está aprobada para 44 países de Latinoamérica y Argentina fue pionera en la aplicación a hombres y mujeres”, manifestó el médico ginecólogo.
La iniciativa para la eliminación del cáncer de cuello de útero
El experto contó que hace dos años la Organización Mundial de la Salud (OMS) “lanzó la iniciativa para la eliminación del cáncer del cuello de útero” y que la misma tiene tres pasos: “Tener una cobertura vacunal del 90% en niñas, que el 70% de las mujeres se hagan, por lo menos, 2 test en la vida de HPV, a los 35 y 45 años, y que el 90% de las mujeres diagnosticadas con lesiones precancerosas o cancerosas sean tratadas”.
“En la Argentina hay 5 mil nuevos casos por año de cáncer de cuello del útero y 2.500 muertes, pero, si es diagnosticado en etapas muy tempranas, simplemente hay que hacer una resección pequeña del cuello del útero que se hace con radiofrecuencia y no deja problemas de infertilidad en mujeres”, explicó el Dr. Tatti.
Además, añadió: “La edad promedio de la lesión precancerosa es de 29 años y la del cáncer 45. Se identifica con papanicolao, test de HPV y con colposcopía, a partir de los 2 años del inicio de las relaciones sexuales”.
“A nivel global, con la pandemia cayeron las coberturas vacunales y es el momento de retomarlas al igual que los controles ginecológicos”, expresó el especialista. Luego señaló: “Ya había una vacuna desde el 2006, la cuadrivalente, que fue incorporada en el calendario nacional, desde 2011 para niñas y desde 2017 para niños. Es una vacuna neutra de género para niñas y niños y se aplica en 2 dosis y se la puede aplicar a la población con HIV e inmunosuprimida hasta los 26 años”.