El secretario de Agricultura, Sergio Iraeta, y el titular de ARCA, Juan Pazo, dialogan este miércoles con los dirigentes de las 4 entidades sobre aspectos técnicos de la reducción temporal de las alícuotas.
El secretario de Agricultura de la Nación, Sergio Iraeta, y el titular de la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA), Juan Pazo, reciben este miércoles a los dirigentes de las 4 entidades de la mesa de enlace (CRA, SRA, FAA y Coninagro) para abordar detalles de los aspectos técnicos referidos a la baja temporal de las retenciones, que regirá hasta el 30 de junio.
Se trata de un encuentro anticipatorio del que está previsto entre los dirigentes del campo y el ministro de Economía, Luis Caputo, para el jueves 6 de febrero.
Los ruralistas elogiaron la medida del Gobierno, pero planteron dudas sobre si el beneficio se trasldará de manera directa a los productores agropecuarios y sostuvieron que es necesaria su eliminación definitiva.
Al respecto, consideraron que las retenciones “son un tributo regresivo y perjudicial que debe ser eliminado de manera definitiva”.
“Este impuesto ha sido históricamente un freno para el desarrollo del sector productivo. No es sostenible pedirle al productor que pague impuestos cuando ni siquiera logra cubrir los costos de producción”, subrayaron desde la Comisión de Enlace de Entidades Agropecuarias (CEEA) por medio de un comunicado.
Por eso, evaluaron, la eliminación de este impuesto “no debe sólo ser una medida transitoria, sino un cambio estructural que garantice las condiciones para fomentar la inversión y el desarrollo genuino”.

“Desde el año 2002, los productores agropecuarios hemos aportado más de 200 mil millones de dólares en retenciones. Creemos que ha llegado el momento de que esos recursos se transformen en inversión y trabajo genuino en las provincias que generan riqueza y empleo”, manifestaron.
“Sostenemos que estas medidas son un paso positivo en la dirección correcta. La eliminación de retenciones para productos de las economías regionales es una medida fundamental para cientos de productores que están asfixiados y necesitaban de ese alivio. La baja de alícuotas para los otros productos va en el sentido correcto, aunque siempre pregonaremos por la eliminación definitiva”, remarcaron los ruralistas.

En ese sentido, reafirmaron que “para potenciar al campo como motor económico del país fundamental avanzar también en temas estructurales como la mejora de la infraestructura, la conectividad, la seguridad y otros aspectos que permitan consolidar el desarrollo sostenible del sector”.
Por último, los dirigentes hicieron “un llamado a la clase política para que estas decisiones sean parte de una política de Estado que priorice el desarrollo productivo del interior del país y el bienestar de todos los argentinos”.