Volvieron a llevarse un equipo de sonido que había sido repuesto del ataque ocurrido hace dos años. La Policía investiga por qué la alarma instalada para evitar estos hechos falló en el momento crucial.
El Centro de Desarrollo Infantil Jesús de Nazareth de la ciudad de Monte Caseros volvió a ser robado y dañado por quinta vez en solo tres años. La Policía investiga el hecho y no descarta que se trate de los mismos delincuentes en todos los casos. Hasta el sistema de alarma, que debía alertar del ilícito, falló.
“No sabemos si fue el miércoles de noche o la madrugada de este jueves, pero forzaron las rejas y puertas traseras del edificio y se llevaron un parlante con luces de colores que habíamos repuesto luego del robo anterior que habíamos sufridos y se llevaron uno similar. Nos genera mucha impotencia cada vez que ingresan y provocan este daño”, contó Estela Maris Romero directora del establecimiento al medio local AVC Producciones.
El CDI Jesús de Nazareth está ubicado en la esquina de las calles Atamañuk y Juan Pujol de la ciudad de Monte Caseros y allí asisten infantes de distintas edades y funciona como contención para una gran cantidad familias de la zona.

Según indicó Romero, los delincuentes ingresando por la parte posterior, aprovechando la poca iluminación que existe en esa zona. Destrozando candados, rejas y forzando cerraduras de las puertas para luego recorrer el interior y llevarse lo más valioso que pudieron. El equipo de audio que se llevaron tiene luces de colores y era utilizado para cantar y animar a los niños. Lo increíble en este caso es que la institución contaba con un moderno sistema de alarmas, justamente colocado hace poco para evitar que los robos vuelvan a suceder, pero falló en el momento crucial y jamás se activó, por lo tanto nadie se enteró del hecho, sino hasta que se presentaron ayer a la mañana a trabajar. La Policía investiga ahora porqué razón no se activó esta alarma.
Antecedente que asustan
El CDI Jesús de Nazareth viene siendo objeto de reiterados robos. A mediados de Febrero de 2022 la misma institución había sufrido dos robos similares en con solo 3 días de diferencia uno del otro y en los que se llevaron un equipo externo de un aire acondicionado, de la salita de niños de tres años en el primer golpe, mientras que en el segundo, se llevaron un televisor de 45″ y un equipo de sonido, además elementos didácticos, ninguno de los cuales se pudo recuperar. En aquella oportunidad los delincuentes pretendían llevarse también un Horno eléctrico que lo dejaron en el suelo de la cocina y que no pudieron robar. Se presume que pudieron haberse asustado por la llegada de alguna persona. Además de esto, los daños provocados por los maleantes al ingresar al establecimiento, rompiendo aberturas. El centro ya había sido robado el año anterior un par de veces más.