En un operativo nocturno, Gendarmería y Policía Rural descubrieron la insólita maniobra. El pesado rodado, sin habilitación frigorífica ni sanitaria, tenía carne no apta para consumo humano. Conductor y acompañante quedaron presos por infracción al artículo 206 del Código Penal.
En un control conjunto realizado anoche por personal de Gendarmería Nacional, Escuadrón 47 “Puesto Filadelfia”, y la Policía Rural de Ituzaingó, sobre ruta nacional 12 kilómetro 1238 interceptaron un camión de carga de materiales que transportaba carne vacuna faenada de manera clandestina.
Al requisar el vehículo Ford Cargo, los efectivos descubrieron en la cabina, debajo del asiento del acompañante, un ternero completo faenado.
En total se secuestraron aproximadamente 250 kilogramos de carne bovina que era trasladada sin cadena de frío, sin documentación sanitaria ni habilitación alguna.
La médica veterinaria que intervino en el lugar determinó que la carne no reunía las condiciones de aptitud para el consumo humano, por lo que fue decomisada y destruida bajo acta.
El conductor (argentino, mayor de edad), y su acompañante, quedaron aprehendidos y a disposición de la justicia.
La Fiscalía Federal de Paso de los Libres ordenó el inicio de actuaciones por la presunta comisión del delito previsto y reprimido en el artículo 206 del Código Penal Argentino (comercialización de carnes o productos cárnicos adulterados o en condiciones que afecten la salud pública), cuya pena va de seis meses a tres años de prisión.