(Corresponsalía Buenos Aires) Después de la dura interna que desarrollaron los precandidatos a presidente de Juntos por el Cambio, Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta, el panorama para las próximas presidenciales en ese espacio no estaría del todo claro.
La candidata victoriosa, Bullrich, estaría enfrentando una progresiva disgregación de su frente de apoyos, que se acentuó en estos días. Su cruce verbal con Mauricio Macri no es la nota más destacada de este proceso, sino que también se habla de la fuga de apoyos hacia Javier Milei de algunos precandidatos a los que ella apoyó enfáticamente.
El caso más significativo es el de Maximiliano Pullaro, en Santa Fe, a quien ella si bien ella no acompañó activamente en la campaña previa a las PASO, parecía haber logrado su apoyo tras la foto de “unidad” luego de la definición de la interna provincial de JxC que Pullaro protagonizó ante la bullrichista Carolina Losada. Pero no fue así.
Esta semana Pullaro aseguró que, frente a un eventual balotaje, su voto iría por el candidato de La Libertad Avanza. No es el único nubarrón que se asoma en el horizonte de Patricia Bullrich en el interior del país. Varios gobernadores de origen radical o de filiación radical que resultaron victoriosos también empiezan a despegarse de la presidenta del PRO en uso de licencia por la campaña, y evitan sacarse fotos con ella o le restan apoyo en esta etapa clave antes de las Presidenciales
Esto indicaría que le han ido soltando progresivamente la mano. En provincia de Buenos Aires, uno de los distritos de más peso a la hora de decidir una elección por su gran cantidad de electores, Bullrich también estaría teniendo problemas (o fugas de apoyos, para ser más específicos).
Varios intendentes de Juntos por el Cambio que resultaron favorecidos en las PASO estarían acercando posiciones con el actual gobernador bonaerense, Axel Kicillof, aun cuando el precandidato bullrichista a gobernador, Néstor Grindetti, resultó victorioso.
También se habló en estos días de que el expresidente Mauricio Macri, mentor del espacio que hoy dirige Patricia Bullrich, se habría volcado a la búsqueda de alianzas con referentes del peronismo para la constitución de un nuevo espacio -en la hipótesis de máxima- o de una nueva vertiente dentro de Juntos por el Cambio que abrevaría en estos sectores más identificados con el peronismo.
Macri también había expresado, en más de una oportunidad, su simpatía con los postulados de Javier Milei. Con lo cual cada día se hace más ostensible que la candidata a presidente de Juntos por el Cambio pierde apoyo no ya en el electorado independiente, sino dentro de sus propias filas, algo que no pudo revertir ni la definición de Carlos Melconian como su eventual ministro de Economía.