(Corresponsalía Buenos Aires) – La ex presidenta publicó una carta dirigida a los jueces de la Cámara de Casación Penal que este miércoles emitirán su fallo en la causa Vialidad. En el texto, la exmandataria cuestiona el rol de los magistrados Mariano Borinsky, Gustavo Hornos y Diego Barroetaveña, a quienes acusa de responder a intereses políticos antes que a la justicia, sugiriendo que estos se encuentran alineados con sectores de poder mediático y político que buscan “proscribirla”.
Cristina no escatimó en críticas y señaló que estos jueces, a quienes denominó los “Copitos de Comodoro Py”, actuarán con una condena ya predeterminada, tal como –según su carta– fue promovido por medios como Clarín y La Nación. La expresidenta remarcó que esta condena implicaría su “inhabilitación para desempeñar cargos públicos a perpetuidad” y afirmó que se mantendrá en pie pese a cualquier intento por callarla: “Sepan que hagan lo que hagan, no van a hacerme callar. No fui ni seré nunca mascota del poder”.
En su mensaje, titulado “Clarín, La Nación, Los Copitos y el delito imposible”, Fernández de Kirchner trazó paralelismos con la banda implicada en el intento de magnicidio del 1 de septiembre de 2022, asegurando que estos “Copitos de Comodoro Py” buscan cumplir órdenes de poderes extrajudiciales y describiendo a los jueces como “parte de la misma banda” que sentenció su condena en 2022.
La ex jefa de Estado arremetió en particular contra los jueces Borinsky y Hornos, quienes, según ella, habrían tenido reuniones con Mauricio Macri durante su gobierno, mientras que Barroetaveña sería un representante de intereses de la lista macrista en el Consejo de la Magistratura. También mencionó al juez Rodrigo Giménez Uriburu y al fiscal Diego Luciani, ambos ligados al expresidente Macri por supuestamente compartir un equipo de fútbol, lo cual, según ella, compromete su imparcialidad en esta causa.
Fernández de Kirchner argumentó que la causa Vialidad es un “delito imposible”, ya que los contratos cuestionados habían sido aprobados por el Congreso y ejecutados por la provincia de Santa Cruz, sin responsabilidad directa de su gobierno nacional. Según la vicepresidenta, ningún Jefe de Gabinete ni el propio ministro responsable del área durante sus mandatos fue acusado o condenado, subrayando que la causa, en su opinión, carece de sustento jurídico.
A pocas horas del esperado fallo, Cristina Kirchner parece ya anticiparse a un veredicto en su contra, uno que, afirma, ha sido “promocionado durante meses” por la prensa y apunta a proscribirla políticamente de manera definitiva.