(Corresponsalia Buenos Aires) – Según un artículo publicado en Lapoliticaonline , Elisa Carrió ha llevado a cabo conversaciones secretas con la Confederación General del Trabajo (CGT) en un paso histórico para la política reciente. Estos contactos tienen como objetivo confrontar al gobierno de Javier Milei, al que Carrió considera autoritario.
Esto surge después de la separación de Carrió de Juntos por el Cambio debido a su desacuerdo con la alianza entre Mauricio Macri, Patricia Bullrich y Milei, a quienes acusa de buscar un “ajuste brutal con represión”. Como resultado, los diputados de Carrió abandonaron el bloque de Juntos por el Cambio y crearon una bancada independiente junto con Miguel Pichetto.
Fuentes consultadas por Lapoliticaonline indican que Carrió está trabajando con los sindicatos para asegurar votos en contra del Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) sobre desregulación, presentado por el presidente en el Congreso junto con la ley omnibus.
La diputada Paula Oliveto de la Coalición Cívica expresó el rechazo del partido a los proyectos de Milei, afirmando que el partido nunca ha votado por delegaciones de facultades desde sus inicios.
El DNU en cuestión preocupa especialmente a la CGT, ya que contiene disposiciones que suponen una reforma laboral sin el consentimiento previo de los sindicatos. A pesar de la suspensión de los artículos del DNU por parte de la Cámara de Apelaciones del Trabajo, la CGT mantiene su plan de un paro general el 24 de enero en rechazo al mismo. Además, afirman que el paro cuenta cada vez con más apoyo de las bases sindicales, desmintiendo las especulaciones sobre una posible reducción de la medida de fuerza incluso después de los comentarios de Sergio Massa que sugerían su premura.