El “mendigo más rico del mundo”: tiene varias propiedades, vive de rentas pero nunca dejó de pedir en la calle

Bharat Jain, quien comenzó pidiendo monedas en Mumbai, ha construido una fortuna significativa a través de una estrategia calculada.

En el complejo y desigual paisaje de MumbaiIndia, surge una historia sorprendente que desafía las normas convencionales sobre la riqueza y el trabajo. Bharat Jain, conocido como “el mendigo más rico del mundo”, ha llamado la atención por su singular historia. A pesar de tener varias propiedades y vivir de rentas, Jain nunca dejó de pedir dinero en las calles, un hábito que lo acompañó durante décadas.

Bharat Jain comenzó su vida pidiendo limosnas, no por elección, sino por necesidad. Su falta de formación académica le dificultó encontrar empleo, empujándolo a las calles en busca de dinero. Sin embargo, lo que podría parecer una situación de desesperación se convirtió en una oportunidad de planificación para él. Con una estrategia bien pensada, comenzó a pedir en zonas estratégicas de Mumbai, eligiendo lugares concurridos y rentables que le permitían obtener ingresos mucho más altos de lo esperado.

A lo largo de los años, Jain llegó a ganar una cifra considerable para los estándares locales, acumulando hasta 885 dólares mensuales. Este ingreso, en un país donde el salario promedio es mucho más bajo, le permitió comenzar a invertir en bienes raíces. Con el tiempo, logró adquirir varias propiedades, incluyendo apartamentos que hoy le generan ingresos pasivos a través del alquiler, lo que le asegura una estabilidad económica.

Jain decidió continuar pidiendo a pesar de tener ingresos. (Foto: Times of India)
Jain decidió continuar pidiendo a pesar de tener ingresos. (Foto: Times of India)

A pesar de haber acumulado una fortuna, Jain nunca dejó de pedir dinero en las calles. Para muchos, resulta difícil comprender por qué alguien que posee propiedades y vive de rentas sigue con la actividad que inicialmente le permitió sobrevivir. Sin embargo, en el caso de Bharat, parece que esta práctica se convirtió en una parte esencial de su vida, una rutina que decidió no abandonar.

El mendigo más rico del mundo: la educación que le dio a sus hijos y la realidad de Mumbai

Jain es padre de dos hijos, a quienes educó de manera estricta, asegurándose de que recibieran una formación académica sólida. Hoy en día, ambos tienen trabajos estables y no dependen de la fortuna de su padre. A pesar de las diferencias en sus estilos de vida, la historia de Bharat Jain deja una lección clara: a través de la perseverancia y una visión estratégica, logró no solo sobrevivir, sino también prosperar en un contexto de dificultades económicas

La economía de Mumbai es una de las más dinámicas y grandes de la India. Como principal centro financiero del país, la ciudad alberga la Bolsa de Valores de Bombay (BSE) y varias sedes de corporaciones multinacionales. Los sectores clave incluyen la banca, los seguros, el entretenimiento (especialmente Bollywood), las tecnologías de la información y la fabricación. Sin embargo, Mumbai también enfrenta desafíos de desigualdad, con una gran población viviendo en la pobreza. La ciudad combina un crecimiento económico impresionante con problemas significativos de infraestructura y vivienda.

La ciudad de Mumbai tiene grandes diferencias de clases (Foto: REUTERS/Francis Mascarenhas)
La ciudad de Mumbai tiene grandes diferencias de clases (Foto: REUTERS/Francis Mascarenhas)

Conseguir trabajo en Mumbai puede ser tanto fácil como difícil, dependiendo del sector y las habilidades del candidato. En sectores como la tecnología, la banca, y los medios de comunicación, hay una alta demanda de profesionales calificados, lo que facilita la búsqueda de empleo para quienes tienen educación formal y experiencia.

Sin embargo, muchas personas, especialmente aquellas sin estudios o habilidades específicas como el mendigo, enfrentan grandes desafíos para acceder al mercado laboral formal, lo que puede llevarlas a empleos informales o de baja remuneración. La competencia es alta debido a la gran densidad poblacional.

En la actualidad, Bharat Jain continúa su vida entre las calles de Mumbai, donde sigue pidiendo limosna. Su historia es un ejemplo singular de cómo la riqueza y la pobreza pueden coexistir en una misma persona, y cómo el esfuerzo y la planificación pueden cambiar por completo el rumbo de una vida, incluso desde las condiciones más adversas.

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