El incendio en el resto bar “Miranda”, situado por calle Catamarca casi San Martín, en pleno centro de la ciudad Corrientes, fue un verdadero llamado de atención para las autoridades, ya que pudo haber sido una verdadera tragedia. Mientras pareciera que el caso va quedando en el olvido hay quienes lo padecieron y deberán vivir con esa horrible experiencia.
“Ese día estaba feo el tiempo y empezó a llover, justo cuando estábamos en el balcón. Hacía unos minutos, justo pedimos para cenar. Entonces, para estar más cómodas nos bajaron a un entrepiso que en realidad es el segundo piso de la casona. Estábamos encerradas ahí, junto a mis amigas y varias personas más. De golpe dejamos de escuchar la música. No se escuchaba nada. No nos dimos cuenta de que se estaba todo encendiendo porque nunca nos avisaron nada. Nadie vino a gritarnos para desalojar, ni siquiera tenían alarmas antiincendios; nada de nada”, me contó Verónica.

Para la jovencita había un mal presentimiento entre los presentes, pero todo se volvió más aterrador cuando se cortó la luz. “Estábamos encerradas sin saber qué pasaba. Una de mis amigas fue hacia la ventana y se dio cuenta de que había mucho humo; entonces comenzó a gritar que salgamos porque se estaba incendiando el lugar. Cuando reaccionamos, el humo ya había invadido todo. Empezamos a correr por donde pudimos. Intentamos subir, pero no podíamos por todo el humo que había. No se veía nada y comenzamos a sofocarnos por la falta de oxígeno. Ya no se podía respirar”, describió Verónica.
En esa instancia no hubo muchas alternativas. Era salir como fuera o quedar a morir. “En medio del humo vimos el techo del estacionamiento y no lo pensamos, saltamos sin pensar porque la verdad es que estábamos muriendo. Todos los que estábamos en el techo necesitábamos oxígeno. Estábamos tosiendo. A algunos les sangraba la nariz por cómo nos forzamos para respirar. Muchos de nosotros perdimos todas las cosas en el edificio y nadie nos las devolvió. El dueño estaba por allí y ni agua nos trajo a las víctimas. Es mentira que era solo un grupo de amigos. Había mucha gente en el lugar”, concluyó Verónica.
Al menos dos dotaciones de bomberos trabajaron para extinguir las llamas. Al parecer, todo apunta a que se trató de una falla eléctrica la que originó el siniestro que todavía se investiga. Toda la planta baja de lugar quedó destruida.