Delia Fernando y Alejandra Basualdo son licenciadas en Fonoaudiología y Kinesiología, respectivamente. Ambas trabajan en el Instituto de Rehabilitación “Leopoldo Mandic” y estuvieron en los estudios de Radio Sudamericana en vísperas de un nuevo Día Mundial de la Parálisis Cerebral, conmemorado cada 6 de octubre. Dieron sus consideraciones al momento de tratar este tipo de condiciones.
Cada 6 de octubre se conmemora el Día Mundial de la Parálisis Cerebral, una condición que cada vez afecta a más niños alrededor del mundo.
Al respecto hablaron Delia Fernando y Alejandra Basualdo, profesionales que trabajan en el Instituto de Rehabilitación de Niños “Padre Leopoldo Mandic”.
“El sistema nervioso central, que es el que se ve dañado en la Parálisis Cerebral, es muy sensible. Cualquier falta de oxígeno, por más mínimo que sea, puede generar problemas y condiciones irreparables. Actualmente se sabe que hay cerca de 17 millones de personas con esta condición. En los países subdesarrollados, entre 3 y 5 de cada 1000 niños sufren de parálisis cerebral en edades muy tempranas”, declararon en los estudios de Radio Sudamericana.
Y añadieron: “No es la causa de la Parálisis Cerebral el hecho de que sean prematuros, pero sí es un factor determinante y de mucho riesgo. Cuando un niño permanece en Neonatología es propenso a sufrir lesiones y traumas de algún tipo, pudiendo derivar a malformaciones”.
Por otra parte, ambas se encargaron de remarcar la particularidad de cada niño con esta afección. “No hay niños con PC que sean iguales entre ellos. Hay algunos más dependientes que otros. Bregamos por la autonomía de estos niños, a pesar de las evidentes limitaciones. Siempre hay una condición de base que genera un movimiento, provocando experiencias diferentes en los niños”, detallaron.
Y agregaron: “En algunos pacientes lleva hasta 3 años distinguir las cuestiones de la Parálisis Cerebral. La carencia de experiencias en el niño es clave al momento de la gravedad a la que puede llegar la condición. Hoy existe una ley de discapacidad, a pesar de que la cobertura hoy está en juego. Para cada niño tiene que haber una serie de experiencias determinadas”.
Por último, marcaron la importancia de fomentar la autonomía del niño, sin privarlo de experiencias que podría realizar.
“Queremos que puedan promover autonomía en el niño, desde lo más mínimo. Desde si quiere una prenda o un juguete en específico hasta las más grandes, dependen de una actitud y de los entornos en los que se desenvuelvan. Debemos adecuarnos a los niños y velar por su autonomía, pese a las limitaciones que presente”, explicaron Basualdo y Fernando.
Y concluyeron diciendo que “si no se los deja funcionar y se los sobreprotege, es muy difícil después revertir eso. El punto al que queremos llegar es que cada niño pueda participar de los eventos y situaciones que lo rodean, en la medida que sus aptitudes lo permitan”.
FUENTE: RADIO SUDAMERICANA