Lucas Martínez Vidal, de 17 años, estudia para algún día llegar a ser bombero voluntario, vocación que tuvo desde los 12, inculcada por su hermano. Destacó la labor de sus camaradas en la lucha de los incendios en el último verano y agradeció la nueva autobomba para su cuartel.
El orgullo se reflejaba en su rostro, el sólo hecho de pertenecer a un equipo de profesionales que en cada salida se juega la vida lo hace sentirse muy feliz con la carrera que eligió. Hablamos de Lucas Martínez Vidal, un joven de tan sólo 17 años que ya forma parte dl Cuartel de Bomberos Voluntarios de Bella Vista.
El joven que se volcó a la labor de servir y proteger a la gente de los incendios detalló que pertenece al destacamento central de Bella Vista. “Tengo 17 años y en el cuartel estoy desde los 12 años, me instruí en la Escuela de Cadetes que está en la ciudad de Bella Vista”, remarcó el joven con su amplia vocación de servicio.
Comentó el porqué de su decisión por ser bombero a tan corta edad. “Es algo que se vive día a día, es algo muy lindo; te nace del corazón esa adrenalina cuando escuchás la sirena. En mi caso, yo vivo a media cuadra del cuartel y es algo muy lindo. Siente muy bien”, detalló a época.
Al ser consultado sobre qué le dijeron los padres cuando decidió ser bombero voluntario desde tan pequeño -a la edad de 12 años- respondió: “Les dije a mis padres que quería ser bombero -mi hermano también lo es-, y me dieron el sí; entonces, empecé a instruirme”.
Este cuartel fue el que perdió su unidad al ser alcanzada por las llamas en uno de los tantos incendios que hubo en la provincia a principio de año. Lucas recordó la tristeza de ver prenderse fuego su autobomba con la que combatían los focos ígneos. “Bella Vista perdió una unidad en el verano, el 13 de febrero, en un incendio en un campo en la zona Sur, donde lamentablemente le alcanzaron las llamas”, expresó.
También mencionó que “en ese momento, estuve ayudando y sí estuve presente en ese incendio”.
Al ser consultado sobre en qué consiste su labor actual en el cuerpo de Bomberos Voluntarios de Bella Vista remarcó que “cumplimos las órdenes que nos da nuestro jefe y en caso de incendios es ayudar en todo lo que se pueda, ya sea logísticamente”, ya que el adolescente aún se encuentra en formación.
Pero al mismo tiempo están siendo capacitados en terreno para que sepan el manejo en los momentos difíciles de un incendio, “se nos capacita todo el año para estar preparados para cada tipo de siniestro”, aseveró el joven bombero.
Fue abordado sobre si este año tuvieron que acudir a sofocar otros siniestros comparados en magnitud a los que sufrieron a principios de año, que provocaron una catástrofe en nuestro territorio provincial, al respecto señaló que “hubo incendios no tan grandes en magnitud como los del verano pero si hubo diferentes incendios forestales de varias hectáreas, tuvimos incendios estructurales y de vehículos también, por lo que estamos un poco ‘movidos’ en esta etapa del año”.
En lo que se refiere a los incendios, detalló que rara vez son naturales ya que “la mayoría se produce por negligencia de la gente y muchas veces son provocados a propósito”.
Siempre cuando somos chicos tenemos la ilusión de ser bomberos, policías o doctores, pero este joven adolescente está cumpliendo su sueño de la infancia. “A mí me da una alegría en el corazón escuchar por un lado la sirena y por otro los nervios de saber qué es, pero siempre presentes para poder ayudar a la comunidad”, expresó.
Junto a sus jefes se acercó hasta Casa de Gobierno, donde además de la entrega de subsidios a los diferentes cuarteles de bomberos de nuestro territorio, la Provincia les entregó una nueva autobomba, ya que sufrió las llamas de un gran incendio a principios de año, y para que su trabajo se optimice, “vinimos por nuestra nueva autobomba 0km donada por el Gobierno de Corrientes”, dijo.
Para finalizar, remarcó la vocación de servicio de todos los bomberos, no solamente de Bella Vista, sino de la provincia: “Hay guardias las 24 horas, son cuatro guardias las que se cubren con cuatro personal por cada una, hacen una rotación por semana para que el cuartel esté las 24 horas abierto”.