La dirigencia local de la UTA desconoce la apertura del procedimiento preventivo de crisis presentado por las empresas que prestan servicio en la capital. Se suman a la convocatoria nacional por falta de acuerdo salarial con la FATAP.
Los usuarios correntinos se van a quedar sin colectivos por dos días. La filial local de la Unión Tranviarios Automotor (UTA) ratificó que se suma al paro de 48 horas convocado por la dirigencia nacional del gremio.
En la capital, las empresas nucleadas en la Cámara de Empresarios del Transporte Urbano de Corrientes (CETUC) presentaron ante la Secretaría de Trabajo la apertura del procedimiento preventivo de crisis, razón por la cual se definió una convocatoria a conciliar que fue desoída por el sindicato que inscribió su huelga en el marco de la convocatoria gremial central.
La protesta, además de Corrientes, se hará efectiva en Río Negro, Chaco, Entre Ríos, Formosa, Jujuy, San Luis, el sur de Santa Cruz, Santa Fe, Santiago del Estero y Mar del Plata.
El procedimiento preventivo de crisis presentado por las empresas es una traba legal para la realización de medidas de fuerza. La convocatoria de la Secretaría de Trabajo es para hoy a las 9:30 y no se confirmó si los representantes gremiales se van a presentar.
La huelga se definió el lunes luego de que se diera un nuevo fracaso en las negociaciones patrocinadas por la Secretaria de Trabajo de la Nación entre la dirigencia nacional del gremio que conduce Roberto Fernández y la Federación Argentina de Transportadores de Automotor de Pasajeros (FATAP).
“La Nación ha expresado reiteradamente que no generará aporte alguno para la actividad a pesar de que se encuentra vigente el Presupuesto del año 2023 que contemplaba las partidas para el Fondo Compensador al Transporte del Interior”, expresó la FATAP en un comunicado.
Millones de afectados
La protesta de choferes del servicio de transporte afectará a 13 ciudades, entre ellas a Resistencia, Corrientes y Formosa, con Posadas como la única del NEA en la que no habrá reclamos.
El paro convocado por la UTA afectará a otras diez provincias y es el corolario de la caída de las negociaciones entre el gremio y la Federación Argentina del Transporte Automotor de Pasajeros (FATAP).
La huelga también está convocada en Bariloche, Entre Ríos, Jujuy, Mar del Plata, Río Negro, San Luis, Santa Cruz Sur, Santa Fe y Santiago del Estero, con lo que la lista de poblaciones afectadas se suma a varios millones.
La protesta se da en el marco de un cambio de paradigma en la prestación del servicio en las provincias, por la decisión del presidente Javier Milei de privilegiar con los subsidios a la población que reside en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y los municipios de Conurbano Bonaerense.
Vale informar que en las ciudades en las que no se realiza el paro, la UTA tiene un acuerdo paritario que estableció un básico conformado de $597.000 que en febrero se elevó a $737.000 y que para marzo llegará a 957.000 pesos, con cláusula de revisión en función del impacto inflacionario para el 15 de marzo.
Distinta es la situación en el interior donde el gremio y las empresas no alcanzaron un acuerdo, ya que la quita de subsidios, dispuesta por Javier Milei, complica la ecuación de costos de las empresas que aseguran que los salarios pactados para el AMBA son impagables en el interior.
La medida presidencial, dispuesta como castigo a las provincias cuyos legisladores no votaron el proyecto de Ley Ómnibus en el Congreso de la Nación, forzó a una serie de aumentos de la tarifa del boleto que, sin los subsidios, sufrieron importantes aumentos, como en Resistencia que el 15 de marzo costará $590 de los $85 que se fijaron como pauta a fines del año pasado. En el AMBA es de $270; en tanto que en el interior va de esa cifra a montos superiores a los $1.000.
Crisis terminal
Al comentar la situación que afecta a las empresas del interior, el secretario de la FATAP, Gustavo Larrea, aseguró que “el sistema de transporte nunca estuvo en este nivel de crisis”. Además, remarcó que “no existe deuda” con los trabajadores del sector.
En una entrevista con Radio Dos, el representante empresarial anticipó que si continúa esta situación “no va a tardar mucho tiempo” que las grandes ciudades se queden sin el servicio de transporte como ya viene ocurriendo en algunas localidades del interior de las provincias. “Es un servicio que va camino a precarizarse”, afirmó.
Reiteró sus conceptos ya expresados en cuanto a que la escala salarial que exige el gremio es impagable y manifestó que ante la complicada situación del transporte “el usuario es el actor más vulnerable de todo este sistema”.
Pérdidas
La decisión presidencial de castigar a las provincias hizo que las provincias no reciban $11.500 millones que figuran en el Presupuesto Federal en razón que se prorrogó el del año pasado.
Para el caso de las empresas que prestan servicio en la ciudad de Corrientes, esa reducción alcanza los 200 millones de pesos por mes y cuando finalice marzo la pérdida será de 600 millones. Vale aclarar que estos datos no contienen el impacto inflacionario.