El 14 de octubre se celebra el Día Mundial de la Espirometría, que se promueve con el objetivo de dar a conocer el estudio y así generar conciencia sobre la importancia de las enfermedades pulmonares y sus medidas preventivas.
Se trata de un estudio no invasivo, de bajo costo, rápido e indoloro, que se utiliza para medir la cantidad de aire en los pulmones, así como la velocidad del flujo de aire (inhalaciones y exhalaciones) durante la respiración.
Espirometría en hospital privado
Tiene una duración promedio de 30 minutos, dependiendo de la cantidad de veces que se deba soplar en el dispositivo. El paciente debe permanecer sentado y exhalar aire, soplando rápidamente por la boquilla del espirómetro, a fin de medir los valores de su capacidad respiratoria.
Este examen se aplica:
– Para determinar síntomas respiratorios: tos, catarro, sibilancia o falta de aire.
– Para control de tratamientos respiratorios.
– Para diagnosticar o hacer seguimiento a enfermedades respiratorias y pulmonares (asma, fibrosis pulmonar, EPOC).
– En personas fumadoras o exfumadoras.
– En personas con exposición a sustancias en actividades laborales vinculadas a la industria minera, textil, química, metalúrgica, petrolera, maderera.
– Previo a determinadas intervenciones quirúrgicas.
Es importante que aquellas personas que tienen una enfermedad respiratoria conocida, o factores de riesgo para padecerla, acudan a un especialista para su evaluación inmediata y aplicación del tratamiento médico.