La secretaría de Agricultura de la Nación fijó un nuevo precio para la hoja de yerba mate, tanto en la materia prima fresca como canchada, y estipuló un aumento del 49,46%, lo que incrementó el precio de la Yerba por kg.
Hoy en las góndolas de los supermercados el kg de yerba paso a costar más de $1.000 mil pesos (la moneda de más alto valor) en la República Argentina. En líneas generales, en el año 2017 con $1.000 mil pesos se podían comprar, 14 paquetes de yerba mate de 1 kg, hoy 31 de octubre con el mismo billete, no alcanza ni para comprar 1 kg.
“En el caso de la yerba mate, lo elegimos como un alimento icónico de Argentina, así como también colocamos al asado. También incorporamos a la nafta como un producto muy usado y para que se entendiera que no se trata sólo de los alimentos. Lo importante es ver cómo la inflación afecta a todos los bienes y servicios de la economía argentina”.
La lógica que aplicamos para la yerba, sucede lo mismo con el asado. En diciembre de 2017 podíamos comprar 8 kilos de asado y hoy podemos comprar con suerte un kilo. Es decir, el billete vale 6,5 kilos menos en cinco años.
YERBA MATE DE 500 GRAMOS
El aumento acumulado de la yerba de 500 gramos desde 2008 a la actualidad, es de 11.402%. Con $500 pesos en 2008 se podían adquirir 162 paquetes de yerba, en 2022 solo se puede comprar un paquete. Por otro lado en 2008 con $1.000 se podían pagar 323 paquetes de yerba, y hoy solo tres.
El consumo interno de yerba mate en lo que va del año
De acuerdo al último relevamiento elaborado por el Instituto Nacional de Yerba Mate (INYM), durante los primeros cuatro meses del año el consumo interno de yerba mate sumó 90, 9 millones de kilos. En tanto, solo en el mes de abril el mercado local demandó 22.852.792 kilos.
A lo largo del año pasado, en Argentina se consumieron 282.9 millones de kilos de yerba mate, superando así el récord que se había alcanzado en 2019 con 276,8 millones de kilos.
Desde el INYM aclaran que estas estadísticas responden al movimiento de yerba mate a salida de molino, debido a que se trata del indicador más cercano al comportamiento de la yerba mate en góndola porque incluye tanto el volumen que se envía a los centros de distribución de las firmas yerbateras como las compras efectuadas por los mayoristas, hipermercados y supermercados.