La madre de la oriunda de Berazategui hizo un gran esfuerzo al entrar al reality pero, al parecer, su hija no lo valora debidamente.
La entrada de los familiares de los participantes a la casa de Gran Hermano revolucionó todo. Y cada vez van quedando menos, ya que la modalidad del juego permitió que cada gala uno de ellos quedara eliminado.
Además, serán días de mucha ansiedad porque el último en abandonar el reality le regalará el liderazgo al “hermanito” querido y, también, ganará una moto para él y su familiar.
Pero a pesar de todo esto quien pareciera no estar tan conforme con el ingreso de su madre Gladys es Lucila “La Tora”, quien siempre se destacó por tener una fuerte personalidad tanto adentro como fuera de la casa.
Lucila no tiene filtro con su mamá, quien hizo un enorme esfuerzo para entrar, y le marca los tantos en cuanto diferencias de pensamientos por ser de otra generación, y diferencias de personalidades.
“Hace más de 5 años que no convivo con ella”, le reveló la jugadora a Nacho y Rodo, haciendo entrever que la convivencia con su mamá claramente no era lo que ella pretendía. Es más, dijo con ella presente que quería que entrara una amiga suya.
Romina, quien vio llorando a Gladys, se preocupó por el trato de La Tora hacia Gladys y quiso hablarlo con su compañera para saber qué sucedía entre ellas. Sin embargo, optó por mantenerse al margen sobre el vínculo que las une.