Horacio Rodríguez Larreta recibió una carta del Papa Francisco en medio de la Cumbre de Alcaldes C40 y resaltó el trabajo en común para encontrar soluciones.
El Papa Francisco fue invitado por Horacio Rodríguez Larreta para ser parte de la Cumbre Mundial de Alcaldes de C40. Sin embargo, no asistió al encuentro y en cambio agradeció el gesto del Jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires con una carta.
A través del escrito, además de referirse a los acuerdos con los demás países y el cambio climático como eje, el principal tópico de la reunión, el Papa Francisco resaltó la importancia de la unidad. Cabe mencionar que en 2023 se llevarán adelante las elecciones presidenciales.
En este contexto, en la política argentina trascendieron distintas fracturas internas entre los partidos. Por lo que el Papa Francisco habría hecho un sutil comentario al respecto en la carta a Rodríguez Larreta.
De esta manera, remarcó al principio del escrito que urge “la mayor participación de todos los ciudadanos en la búsqueda de soluciones reales”. Dicha cooperación debe además, “trascender fronteras y mancomunar esfuerzos” para así “generar un diálogo”.
“Esta cumbre convocada por Ustedes, alcaldes de distintas ciudades, y la dinámica de trabajo propuesta tiene la particularidad y la riqueza de una doble perspectiva que sortea dialécticas o falsos antagonismos”, señaló el sumo pontífice.
Luego, continuó, “Al reunirse, Ustedes reconocen la imperiosa necesidad de ampliar la mirada y buscar un bien mayor que favorecerá a todos”. “Pero lo hacen sin evadirse ni desarraigarse de las problemáticas como de las posibilidades que sus ciudades representan”, remarcó.
Al finalizar, citó un pasaje de su encíclica Laudato Sí publicada en 2015, en línea con el cambio ecológico que mencionó en su carta.
“Darle a ciudadanía a la búsqueda de transformaciones estructurales que permitan reducir la contaminación climática nos impulsa a ‘reconocer que un verdadero planteo ecológico se convierte siempre en un planteo social”, afirmó.
El mismo, expresó “debe integrar la justicia en las discusiones sobre el ambiente, para escuchar tanto el clamor de la tierra como el clamor de los pobres’.