Las autoridades aseguraron que los animales no serán sacrificados, ya que primero harán las investigaciones correspondientes sobre el supuesto matadero ilegal en Nezahualcóyotl, Edomex. ¿Habrá una pena privativa de la libertad?
Decenas de perritos fueron rescatados de las manos de personas que los tenían atrapados y en proceso de engorde para posteriormente vender su carne para consumo humano, en el municipio de Nezahualcóyotl, Estado de México.
De acuerdo con los reportes, este 13 de octubre agentes de la Fiscalía General de Justicia estatal (FGJEM), en conjunto con personal de la Procuraduría de Protección al Ambiente del Estado de México (PROPAEM) y del Gobierno Municipal de Nezahualcóyotl, realizaron un operativo en un domicilio localizado en la colonia Benito Juárez; sitio en el que pudieron rescatar a más de 90 perros que sufrían maltrato animal por parte de algunas personas que se encargaban del lugar.
La Dirección General de Seguridad Ciudadana local aseguró que ninguno de los animales será sacrificado y permanecerán en el Centro de Atención Canina del municipio, por lo menos hasta que terminen las investigaciones correspondientes.
“La Dirección General de Seguridad Ciudadana continuará siendo una institución pro animalista, pues sabemos que todas las vidas son importantes”, aseguró la organización.
Cabe señalar que el operativo se dio como parte de una indagatoria iniciada por la FGJEM, luego de que se hizo difusión en medios de comunicación de que supuestamente estaban engordando a perritos en un inmueble de Nezahualcóyotl, Estado de México, para presuntamente distribuir su carne en comercialización en alimentos.
“Conforme al artículo 235 Bis del Código Penal del Estado de México, el maltrato animal es un delito y se establece cuando se causen lesiones dolosas, se abandone y queden expuestos a riesgos que amenacen su integridad. La pena es de 6 meses a 4 años de prisión”, detalló la Fiscalía local a través de un comunicado.
En cambio, si la persona le causa la muerte no inmediata y prolonga la agonía del animal, la pena es de tres a seis años de prisión. De igual manera, se incrementará hasta en una mitad si el delito es cometido por servidores públicos que tengan por encargo el manejo de ejemplares.
Según la denuncia que había hecho días antes la organización Protección Animal Nitin México AC, el domicilio que fue cateado este jueves por las autoridades llevaba varios años funcionando como un matadero clandestino de perros y su carne era vendida para consumo humano. Con fotografías y videos mostraron la precariedad en la que vivían los animales, detallando que también había “sangre fresca y seca en los pisos y paredes, incluso en el cuerpo de algunos perros, hay huesos y el olor a putrefacción de cuerpos es increíble”.